Situado junto al Cortijo de los Pozuelos, a 260 metros de la sima del Pozuelo I y a 300 metros de la Sima Pozuelo 3, su boca de acceso es una pequeña gatera situada junto a una encina.

Durante la campaña de verano de 1996 y coincidiendo con las exploraciones llevadas a cabo en las simas Pozuelo I y Pozuelo 3 se lleva a cabo una revisión de esta conocida sima, decidiéndose iniciar intentos de desobstrucción en un pequeño sumidero situado en el fondo de la última sala conocida, a -130 metros de profundidad.

En varias jornadas de trabajo se consigue abrir el pequeño paso y descender a unas rampas muy concrecionadas que a los pocos metros desembocan en una fisura impenetrable.

En jornadas posteriores se localiza un nuevo meandro, situado en la base del último pozo y que presenta, a pesar de su estrechez, bastantes esperanzas de continuidad.

A partir de este descubrimiento nuestros esfuerzos se concentran en la desobstrucción.

En 1997 se realiza una nueva topografía de la sima, que arroja hasta la nueva cota alcanzada un desnivel de -145 m.

Se consigue desobstruir y vaciar algunos pasos inundados del meandro, llegándose a la cabecera de un amplio pozo cuyo acceso es necesario forzar para continuar el descenso.

Este pozo consigue descender hasta una cota aproximada de -150 m., a través de un estrecho meandro, deteniéndose la exploración en este punto ante una nueva obstrucción que impide el paso.

Se efectúa la desobstrucción de este paso, que una vez forzado permite seguir descendiendo hasta unos -170 metros, abandonándose en este punto la exploración.

Mientras tanto, en superficie se localiza una nueva boca situada a unos 10 m. Por encima de la existente, que una vez desobstruida permite aumentar la cota total de la sima en 6 metros.